¡Empleado a la fuga!

Maldito sea el amor ajeno, maldita sea la felicidad de los demás... ¡y maldita sea la mala seguridad de mi carcel diario... ¡Ese malnacido de Excelsor se ha fugado! ¿Y por qué? Eso, el muy creidito que se las da de reportertero y poeta cuando no es más que un limpiafogones, me lo ha explicado tras asesinar a Regiardo el limpiabotas. Sí, bueno, lo ha explicado con su sangre, pero eso me da igual. Os leo e invento:

Estimada ama suprema Latricia que me tortura y me esclaviza. Recurro a este método de escritura porqué sus recortes en presupuesto nos han dejado sin bolígrafos.

Tras varios meses limpiando y redactando para su merced, estoy hasta la punta de la llama de que me explote de esta forma, por ello; me voy. Sí, ha leído bien. Me largo al mundo de por ahí afuera con mi amor de toda la vida que ¿Sabes qué? ¡No eres tu! ¡Vaca creída!

Ahí te casen con un Gnomo. 

Tu infiel amante/limpiador/redactor: Excelsor.

Ah... cierto, que quizás no sepáis que el retoño de orco que llevaba redactando por mi (porque soy una vaca muy ocupada entre mis vacaciones de campo y playa pagadas a consta del sufrimiento de los niños goblins esclavizados en Tanaris) se trata del conocido "Excelsor".

¿PUES SABÉIS QUE? ¡A LA CALLE TODO EL MUNDO! Parece que la única persona fiel aquí era Rhonzo Ronzalez... ¿Qué? Ah... también se fugo, cierto... ¡TODOS SOIS UNOS DESAGRADECIDOS! Os doy de comer, os doy una manta y os doy mi corazón ¿y me lo pagáis así? Venga, va. Largaos.

Me voy a encerrar en mi congelador a comer helado a ver si se me pasa esta depresión.